Lima: una ciudad triste, con un eterno cielo gris y, eso sí, muchas iglesias y conventos. Pero, a lo que vamos. Mirad esta foto:
Es la llamada «pampa» de Perú, en la zona de Nazca. Como veis, no es más que un montón de piedras y un par de surcos detrás. Nada que pudiéramos calificar de «extraordinario».
Sin embargo, si elevamos el punto de vista un poco, veremos lo que esos surcos nos muestran en realidad: unas ancestrales líneas que delimitan preciosas y especialísimas figuras: las llamadas Líneas de Nazca. En este caso, vemos el árbol (desde un mirador construido especialmente para esta figura), pero hay muchas más: el mono, la araña, el colibrí, el cóndor, las manos, el perro…
El origen y propósito de estas líneas, que el tiempo misteriosamente no ha borrado, es incierto. Desde la plasmación de constelaciones en el suelo, hasta caminos que se recorrían en ceremonias, o dibujos realizados por extraterrestres, algo que aviva el interés esotérico y turístico de estas líneas. Efectivamente, estas figuras sólo se pueden apreciar desde la altura, ya que son muy extensas. Además, ahí no hay montañas para dirigir los dibujos, así que ¿cómo los pudieron realizar sin una referencia del espacio donde hacían cada surco?
A mí me ha interesado el cambio. Ves un aparentemente anodino secarral de piedras y cuando pasas a una perspectiva más amplia, ves algo único que desde la altura normal no se aprecia. Pues así es este viaje. Es un acto de fe, que está implicando cambiar la perspectiva para valorar mi vida y no perderme lo que antes no veía. Con este cambio en el punto de vista de mi vida, estoy permitiendo que un nuevo Oli nazca.
6 comentarios para “Cuestión de perspectiva”
De eso se trata, Oli: morir en uno mismo para hacer renacer a un nuevo hombre dentro de sí. El viaje como metáfora del sendero que debe recorrerse.
Me encanta la reflexión, y sabía que este viaje iba a ser el comienzo de un nuevo renacer para ti.
Mucho ánimo, amigo.
Hay un método de organización bastante popular llamado GTD que habla de los diferentes niveles de perspectivas de una persona y establece un paralelismo con la altura de un avión (Propone 6 niveles: 15.000 metros o más, tu vida; 12.000 metros: visión personal a tres o cinco años; …; 3.000 metros: proyectos actuales; Pista de aterrizaje: acciones actuales).
Como bien dices, el problema es que tendemos a pasar la vida en la perspectiva del corto plazo (pista de aterrizaje o, como mucho, 3.000 metros) y no nos damos cuenta de hacia adónde estamos dirigiendo nuestra vida porque nos falta altura y perspectiva.
Ya veo que has pasado ya tu «travesía del desierto», por lo menos esta travesía. Sé que no es tu primera, y quizás tampoco la última, experiencia del «desierto», por lo que eres consciente de que siempre éste deja huella y que su paso nunca es baladí.
P.
Oh, qué maravilla de árbol! Ves, si pudiéramos volar como las aves no nos perderíamos tantas cosas… El caso es que yo había oído hablar del creacionismo alienígena, y de que algunas pinturas rupestres podrían estar relacionadas con él, pero no tenía ni idea de que existieran esas señalicas. Si además sirven para que un nuevo Oli nazca pues mejor que mejor aunque ya el viejo tenía su encanto. Sí, sí!
Ánimo y adelante!
Tras unos días de avería en el equipo, volvemos a intentar ponernos al día en tu travesía personal. Maravillosas fotos de las líneas de Nazca, sobre las que tanto se ha escrito o se ha especulado. Nosotros, salvando las distancias, las comparamos a los cimborrios de nuestras catedrales en los que, aun sabiendo que difícilmente nadie vería de cerca la obra acabada, los artesanos se esmeraban tanto como en el pórtico principal. Son obras que no están hechas para ser vistas por los hombres -normalmente de mirada corta- sino por Dios o los dioses, según la ocasión, logrando así su complacencia y sus bendiciones, en forma de lluvia o de protección. Un abrazo.
Vuestros comentarios son TODOS geniales. ¡Gracias! Me encanta la teoría, Pe.
Jose, un abrazo muy fuerte especialmente para ti también.
OLI I7O
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